La propagación de las ondas de sonido se debe a pequeñas variaciones en la presión a nivel local del medio. Esto es, pequeñas compresiones y expansiones son las que se trasladan de unas moléculas a otras. Por lo tanto es lógico pensar que la velocidad de propagación del sonido va a depender del coeficiente de compresibilidad del medio.
Pero también va a depender de su densidad y de la temperatura. Cuanto más denso sea un medio más rápidas se transmitirán las colisiones de unas moléculas con otras. Cuanto mayor sea la temperatura más agitación molecular habrá, lo que facilitará la transmisión de la energía por colisión igualmente.
Por último, la velocidad del sonido dependerá de la masa molecular de la/s molécula/s que lo componen. Y también de su estado. A grandes rasgos tendremos una velocidad del sonido para sólidos, otra para líquidos y otra para gases. En los sólidos es dónde la velocidad será mayor. En los gases, como el aire, es dónde la velocidad del sonido será menor.
No hay comentarios:
Publicar un comentario